Placer, pasión y trabajo. Así define la moda
Andi Cui, un diseñador madrileño que, pese a su juventud, apenas tiene 22 años, ya ha presentado varias colecciones, dentro y fuera de nuestro país, y su ropa firma editoriales de moda de diversas revistas. Lo entrevistamos para descubrir porqué el blanco es su color fetiche, en qué se inspira a la hora de crear una colección y para saber qué opina del fenómeno del “street style”.
Cuéntanos un poco sobre ti. ¿Cómo te describes?
Me llamo Andi Cui, soy de origen chino pero he nacido en Madrid, donde resido, tengo 22 años y soy diseñador de moda.
¿Desde cuándo te gusta la moda? ¿De dónde viene esta pasión?
Desde que tengo uso de razón recuerdo ir de compras con mi madre, que siempre ha sido una gran consumidora de moda además de mi musa. Mi prima también estudió diseño de moda así que me ayudó a convencer a mis padres.
Eres blogger y diseñador. ¿Qué te aporta cada faceta?
Siempre me ha encantado la moda y todos sus campos. El blog me sirvió de mucho para dar visibilidad a mi trabajo, es decir, se convirtió en un medio para poder llegar a ser lo que quiero: diseñador de moda.
Pese a tu juventud, has presentado varias colecciones en lugares tan diversos como Moscú o Valencia. ¿Cómo surgieron ambas oportunidades?
Las oportunidades me las brindó mi universidad, ESNE. Siempre nos han impulsado a participar en concursos para darnos visibilidad, no solo nacional sino también internacional. Estas experiencias me han servido para crecer como persona pero sobre todo para conocer cómo es el ámbito de la moda en otros países y ciudades.
La colección que presentaste en Valencia se denomina “Still”. Cuéntanos, ¿en qué te inspiraste al diseñarla?
Siempre me ha gustado inspirarme en conceptos en vez de en cosas concretas. Me gusta transmitir sensaciones, narrar historias y que el cliente final tenga su propia visión de la colección. Esta colección en concreto estaba inspirada en el proceso creativo de un artista. Cuenta las fases por las que pasa hasta el “parto” de la obra, desde un punto de vista psicológico. Por eso las texturas, los tejidos y los colores eran claves para poder expresar bien esos estados
Placer, pasión y trabajo. Así define la moda
Andi Cui, un diseñador madrileño que, pese a su juventud, apenas tiene 22 años, ya ha presentado varias colecciones, dentro y fuera de nuestro país, y su ropa firma editoriales de moda de diversas revistas. Lo entrevistamos para descubrir porqué el blanco es su color fetiche, en qué se inspira a la hora de crear una colección y para saber qué opina del fenómeno del “street style”.
Cuéntanos un poco sobre ti. ¿Cómo te describes?
Me llamo Andi Cui, soy de origen chino pero he nacido en Madrid, donde resido, tengo 22 años y soy diseñador de moda.
¿Desde cuándo te gusta la moda? ¿De dónde viene esta pasión?
Desde que tengo uso de razón recuerdo ir de compras con mi madre, que siempre ha sido una gran consumidora de moda además de mi musa. Mi prima también estudió diseño de moda así que me ayudó a convencer a mis padres.
Eres blogger y diseñador. ¿Qué te aporta cada faceta?
Siempre me ha encantado la moda y todos sus campos. El blog me sirvió de mucho para dar visibilidad a mi trabajo, es decir, se convirtió en un medio para poder llegar a ser lo que quiero: diseñador de moda.
Pese a tu juventud, has presentado varias colecciones en lugares tan diversos como Moscú o Valencia. ¿Cómo surgieron ambas oportunidades?
Las oportunidades me las brindó mi universidad, ESNE. Siempre nos han impulsado a participar en concursos para darnos visibilidad, no solo nacional sino también internacional. Estas experiencias me han servido para crecer como persona pero sobre todo para conocer cómo es el ámbito de la moda en otros países y ciudades.
La colección que presentaste en Valencia se denomina “Still”. Cuéntanos, ¿en qué te inspiraste al diseñarla?
Siempre me ha gustado inspirarme en conceptos en vez de en cosas concretas. Me gusta transmitir sensaciones, narrar historias y que el cliente final tenga su propia visión de la colección. Esta colección en concreto estaba inspirada en el proceso creativo de un artista. Cuenta las fases por las que pasa hasta el “parto” de la obra, desde un punto de vista psicológico. Por eso las texturas, los tejidos y los colores eran claves para poder expresar bien esos estados